martes, 19 de octubre de 2021

Sueña en rosa

En mi pulsera rosa de la tienda de la Asociación Española Contra el Cáncer pone “Sueña” y en la de color verde pone “Lucha”. Escogí la rosa por ser el símbolo del cáncer de mama pero también por la palabra.

Creo que (casi) todas luchamos y que (casi) nadie se deja vencer, pero por desgracia no todas ganan. Por eso no me gusta la referencia a la lucha, porque las que perdieron la batalla, estoy segura de que también pelearon. 

Y en ese combate, un primer asalto es la actitud, enfrentarse a la enfermedad con la mente positiva. Como me dijo mi médica “hay que llorarlo…pero de esto se sale”. Y curiosamente yo no lloré al enterarme, ni siquiera al decírselo a mis familiares más cercanos -puede que de las cosas más difíciles-, pero se me cayeron unas lágrimas al hablar con mis amigas por teléfono. No por la noticia en sí, sino por su apoyo. Incondicional. 

Y por eso, vuelvo al principio, al comprarme la pulsera, les compré a ellas otros detalles de la tienda, como agradecimiento y como recuerdo. Pero por supuesto también como donación. Porque creo que cualquier pequeña aportación ayuda y porque además de la prevención -sin duda muy importante- la investigación es fundamental para avanzar en la detección precoz. 

Y así todas podremos seguir soñando y no sólo luchando. 





lunes, 11 de octubre de 2021

Redes sociales

 Aunque ya he hablado de algo relacionado con este tema en otros post, creo que lo he visto más incongruente el otro día con la caída de Facebook, Instagram y Whastapp. Me remito a mi alegato a la información que hice aquí y recuerdo a la influencer de moda diciendo que estamos sobreinformados. Pues bien, ahora damos una vuelta de tuerca más y resulta que además, estamos sobreconectados a las redes sociales y lo denunciamos en las propias redes. 

Parece ser que el otro día cuando estuvimos horas sin poder conectarnos, la mayoría de la gente estuvo muy tranquila, paseando, con su familia, con la paz que da no escuchar cómo entran los mensajes ni notificaciones al momento. Y así lo hicieron saber al día siguiente, con la conexión restablecida, en encuestas que leí en Instagram. ¿No es un poco incoherente decir en la misma red social que se cayó lo a gusto que estuviste desconectado de ella? Si así es, ¿por qué tan solo unas horas después estás otra vez enganchado explicando la paz que te da no estarlo? 

El colmo de la incongruencia me parece las propias dueñas de esas cuentas, no sólo las grandes influencer,  que viven -en parte, sé que su trabajo consiste en más tareas- de las redes sociales, hablando de desintoxicarse y apagar el móvil, pero volviendo a conectarse cuando necesitas promoción. Ojo que esto lo veo en muchos ámbitos porque sigo distintas cuentas de moda, scrap, estilo de vida...Al final como audiencia me siento utilizada porque supuestamente desconectan, pero vuelven a publicar cuando quieren enseñarte su último álbum de scrap, colección a la venta, diseño de ropa o producto de publicidad que deben promocionar. 

Para terminar, como conclusión, creo que (casi) todos podemos estar más o menos enganchados a una, a varias o a todas las redes sociales, debemos hacer un uso más responsable, pero no demonizarlas, porque un buen empleo de ellas puede ser muy útil en muchas circunstancias. Y sino, piensa cómo habríamos sobrevivido al confinamiento sin conexión.