No sabía que hoy era el día de la seguridad en internet y me pareció un buen tema. No quiero debatir de nuevo sobre el asunto de las imágenes personales (sobre todo de menores) en nuestras redes sociales, sino de los consejos que suele dar la policía y las charlas que imparte en los colegios, porque me parecen iniciativas muy interesantes.
Nos centramos muchas veces en el tema de las fotos en Facebook sin darnos cuenta de que Whatsapp también es una red social. Quizás tenemos cien amigos en la primera...pero ¿cuánta gente tiene el número móvil? ¡Si lo tiene hasta el señor del gas! Lo damos como forma de contacto en cualquier institución, en el curriculum, en el trabajo... No nos damos cuenta
que la seguridad en internet implica también un antivirus, las contraseñas,
conectarse a wifi públicas seguras, hacer compras seguras, tapar la webcam...y otras muchas recomendaciones que implican utilizar el sentido común.
Es difícil en la sociedad actual seguir algunos de los consejos, como que los niños no tengan móvil antes de los 12 años y no usen Whatsapp hasta los 16, como dice en sus términos y condiciones de uso -las redes sociales exigen tener 14 años para abrirse un perfil-. Hoy decían que el 30% de los menores de 10 años está en Internet y el 79% de los que tienen 13 años. El regalo estrella de los niños en la Primera Comunión es un teléfono y lo quieren para conectarse con sus amigos por las redes sociales, mandarse fotos y chatear. Hay que pensar que no dejaríamos solo a un niño de 14 años sin carnet de conducir en un coche, pero sí los dejamos con terminales de última generación sin tener ni idea de manejarlos.
Hablamos de que son "nativos digitales" y no es verdad, saben utilizar los aparatos pero no saben las consecuencias. Desde bien pequeños acercan sus deditos a la pantalla táctil porque no han conocido otra cosa, pero no conocen lo que hay detrás. Se hacen fotos en momentos íntimos, semidesnudosn en el baño o en la playa sin pensar en pederastas ni ciberbullying. Porque en esas charlas de la policía insisten en que los insultos, amenazas y vejaciones no son un conflicto escolar, son un delito. Tenemos ejemplos claros y recientes en los tuits que investigaron sobre la muerte de Víctor Barrio y Bimba Bosé.
Creo que que el problema es el uso que hacen del movil, cuánto se conectan (ya se habla de adicción en menores), cómo y dónde. Los mayores deben poner unas normas y controlar ese uso, las fotos, los mensajes y saber qué personas tienen agregadas, porque los adolescentes no sólo aceptan solicitudes de amistad de sus conocidos. Decía la policía que cuántos teníamos Facebook y veíamos el perfil de nuestros hijos, y les contestaba que eso ya no vale, que ahora los chicos están en Instagram, Snapchat y Ask.fm (en el que responden a preguntas que se reciben anónimamente) y siguen a los youtubers jóvenes como si fueran gurús.
Cada más vez son más pequeños, cada vez hay más redes sociales. Esto va rapídisimo, tan rápido que deja obsoleto el debate de subir una foto, estamos en otros temas para mí más preocupantes como acoso, insultos, sexting, adicción, depresión.. que han sembrado una alarma social que destierra la oportunidad y las ventajas que también tiene el uso de internet y las redes sociales.
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