sábado, 31 de octubre de 2020

Sobreinformados

Si eres de esos que presumen de no ver las noticias, no sigas leyendo este post porque es un alegato a la información. Voy a sacar una lanza a favor de mis compañeros periodistas que están haciendo una gran labor en esta pandemia, mientras ahora está de moda decir que estamos "sobreinformados" y es mejor apagar la tele por salud. 

Comparto la parte de que todo son malas noticias, por desgracia, pero es la realidad que estamos viviendo. Y ya se sabe que la realidad siempre supera a la ficción. Y ésta se cuenta en los periódicos y en los informativos, no en las redes sociales. No es equiparable estar hiperconectados, con estar hiperinformados. Porque si estás informado por Twitter, apaga y vámonos. Instagram está muy bien para tus ratos de ocio, que por supuesto hay que tenerlos, igual que momentos de desconexión, diversión y deporte. 

Pero que no me venga la influencer de moda a decir que satura tanta mala noticia y a presumir de que mejor se da un paseo. Porque puedes ver una serie, una peli y leer un libro, pero también un informativo o un periódico. Y sobre todo, si yo no me meto con tu trabajo, tú tampoco con el mío. 

No digo que hagas como en mis tiempos de estudiante de Periodismo que estudiábamos las noticias -literal, teníamos un test de actualidad a la semana- y leíamos varios periódicos para compararlos y tener todo el arco de visión -y no eran digitales-. Pero qué menos que ver un telediario al día, que como su nombre indica, es diario. 

Porque sino, lo que pasa es que nos encontramos con este informe en el que los jóvenes no saben quiénes son Miguel Ángel Blanco, Ortega Lara o Irene Villa. Y mira, puedo entender que no vivieran ese horror en directo, pero no conocerles cuando te enseñan una foto, quiere decir que no has visto la tele ni un minuto cada año que han recordado su asesinato, secuestro o atentado durante los últimos 20 años. Y así nos va. 

Así que ahora es cuando me pregunto si no vendrían mal recuperar en las facultades esas preguntas de actualidad. 

martes, 20 de octubre de 2020

Pasitos

Un pasito pa'alante... No es la canción de Ricky Martín que luego daba un pasito pa'atrás, ni las indicaciones de un baile nuevo, sino un aplauso para las personas que en esta vida se comprometen con la acción que sea y dan un paso al frente. 

A veces no se les ven porque quieren permanecer ocultos, pero esa gente existe, están cerca y merecen toda mi admiración. Ante una situación de injusticia o cuando aprecian una necesidad en cualquier ámbito, no se quedan mirando y lamentándose, sino que pasan a la acción, sobre todo en labores sociales voluntarias.  

Porque parece sencillo el simple acto de dar un solo paso, pero conlleva muchas consecuencias detrás para seguir dando más zancadas y mantenerse en movimiento. Requerirá de apoyos, buscar otros compañeros locos como tú que compartan tu causa para poder avanzar más deprisa y acompañado. Significará 'papeleo', recados, burocracia, contactos, reuniones, intercambios... Y supondrá tiempo, mucho, de ese que decimos que nos falta y lo que pasa es que cada uno lo invierte en sus prioridades. 

Todo esto por intentar alcanzar un objetivo que merece la pena y porque creen necesaria cambiar una situación. Son emprendedores, sin esperar nada a cambio, y por supuesto sin recompensa económica, aunque luego siempre dicen que reciben mucho más. Son empujones, porque al buscar apoyos y compañeros, se encuentran con gente que necesita un impulso. Ellos les animan y suman más a la causa. Otros, sin embargo, se quedan inmóviles, callados, dan un paso atrás o se pierden por el camino. 

Pero en esta sociedad egoísta, hay gente que deja huella. 




sábado, 10 de octubre de 2020

Relato contra la pobreza

Todos los días en su camino a clase veía a ese hombre en el suelo entre cartones. En los días malos de invierno, pensaba en el frío que tendría. 

Su madre siempre pasaba de largo casi sin mirarle. Sin embargo, unos pasos más allá, se paraba puntual con la señora que estaba en la puerta del colegio. A veces sólo a charlar, otras le daba algo de dinero, incluso le llevaba algo de comida en la bolsa del almuerzo. 

Nunca entendí la diferencia entre los dos. 

Nunca pensé que la vida a veces golpea a quien más queremos. 

Concurso de microrelatos de EAPN (Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social